Isabela y Daniela
Hoy es un día triste para nosotros, hoy, ha triunfado el mal sobre el bien.
¡Qué ironía!
Hoy, en el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y Tráfico Ilícito de Drogas, la
justicia estadounidense fallo al condenar a un INOCENTE. Le dieron una sentencia de 45
años, cuando tuvo que haber sido de 0 años.
Le creyeron mas a las mentiras de narcotraficantes que tenían algo que ganar que a las
acciones concretas de mi papá Juan Orlando en su lucha contra el narcotráfico. Lucha que
lideró en conjunto con los más altos funcionarios e instituciones de seguridad de los EEUU.
que fue elogiado y reconocido por altos funcionarios como los mismo directores de la DEA,
el departamento de justicia, la CIA, los presidentes Trump, Biden, Obama, entre otros.
Nosotras vimos a mi papa de primera mano, desvelándose, trabajando arduamente por
Honduras.
Como en ocasiones puso en peligro su vida y la de nuestra familia. Para devolverle a
Honduras la paz, la seguridad, y la esperanza.
Recuerdo que nuestro padre nos decía “hijas esta lucha me puede traer consecuencias”,
pero nunca nos imaginamos que las mentiras de narcotraficantes iban a ser utilizadas por
sectores oscuros de la DEA y fiscales que buscaban hacer de un hombre inocente un
trofeo.
El día de hoy como familia nos duele mucho esta tremenda injusticia, también nos duele no
poder estar allá con mi papá en este día tan duro. Cómo es posible que los verdaderos
narcotraficantes tienen a sus familias con ellos en juicios en donde mienten y nosotros
fuimos negados la oportunidad de ir a estar con él. Solicitamos se cumplan las normas
Mandela, le pido al gobierno de USA, a través de su embajadora que por favor nos respeten
el derecho humano de poder ver a nuestro padre mientras dure este proceso.
Por una razón estamos aquí, es porque sabemos quién es nuestro Padre Juan Orlando, él
es un gran padre de familia, hijo, esposo, abuelo, orgulloso ciudadano hondureño, el es un
hombre inocente que fue injustamente condenado.
A los altos funcionarios estadounidenses, y hondureños que trabajaron de la mano con mi
papá. Alcen su voz, no callen la verdad, ustedes saben que mi papá Juan Orlando es
inocente. A los periodistas, investigadores, o cualquier persona que le importe la justicia les
invito a que investiguen por su cuenta y conozcan de primera mano la verdad.
Nosotros lo sabemos, Honduras lo sabe, Estados Unidos sabe que Juan Orlando es
inocente.
Y por eso con la frente en alto nos paramos frente a ustedes y al mundo entero y les
decimos como familia vamos a hacer lo que tengamos que hacer para demostrar la
inocencia de mi papa.
Nuestro padre Juan Orlando es inocente el volverá
