Publicado el 31 de mayo de 2024
Oficina de Asuntos Públicos
En vísperas del tercer aniversario de la creación de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha (JTFA), el Departamento de
Justicia ha anunciado hoy esfuerzos adicionales para desmantelar las operaciones de contrabando de personas y
aumentar la responsabilidad de aquellos que violen nuestras leyes de inmigración. Iniciada en junio de 2021 por el
fiscal general Merrick B. Garland y el secretario de Seguridad Nacional Alejandro N. Mayorkas, la JTFA representa
una asociación entre el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) con el mandato
de perturbar y desmantelar las organizaciones de tráfico y trata de personas que operan en Guatemala, Honduras, El
Salvador y México y a través de estos países. Para aprovechar el éxito de la JTFA, incluido un aumento de más del
25 % de la cantidad de acusados de contrabando de extranjeros desde 2020, el Departamento de Justicia está
reajustando los recursos, proporcionando incentivos financieros y proponiendo penas más graves para los delitos de
contrabando o tráfico de personas.
El Departamento de Justicia también está coordinando con los fiscales federales fronterizos y sus distritos, así como
con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y otros organismos encargados de hacer cumplir la ley, para
evaluar las necesidades actuales y la asignación de recursos, e identificar las oportunidades disponibles y
potencialmente nuevas para abordar las cuestiones de inmigración.
Otorgar prioridad a los enjuiciamientos en los que haya contrabandistas implicados
El Departamento de Justicia seguirá dando prioridad a la persecución de los casos relacionados con el tráfico ilícito
de seres humanos, trabajando a través de la JTFA, dirigida por la Sección de Derechos Humanos y Procesos
Especiales (HRSP) de la División Penal del Departamento de Justicia de EE. UU. (DOJ), y de los esfuerzos de las
distintas fiscalías de Estados Unidos y sus asociados encargados de hacer cumplir la ley.
Los enjuiciamientos por delitos graves de tráfico han seguido una trayectoria ascendente, aumentando un 27 %
desde el año 2020. Estos casos son significativos. Incluyen el contrabando de personas tanto de poblaciones
vulnerables como de individuos que plantean problemas de seguridad, así como el transporte ilegal de activos y
contrabando, la huida a alta velocidad de las fuerzas del orden y la posesión de armas de fuego por parte de los
acusados de contrabando. Centrarse en la persecución de delitos graves de contrabando tiene un efecto disuasorio,
que no sólo afecta al acusado, sino que crea un efecto dominó que desalienta el contrabando en el futuro. Los
enjuiciamientos adicionales por tráfico se centrarán en rutas conocidas utilizadas y controladas por cárteles y otros
grupos delictivos organizados.
La JTFA continuará centrándose en los contrabandistas de personas de más alto nivel, los peores de lo peor. Desde
su creación en junio de 2021, la JTFA ha logrado resultados tangibles importantes, entre ellos:
- Más de 300 arrestos, incluyendo a dirigentes, organizadores y facilitadores importantes;
Más de 240 condenas en Estados Unidos; - Más de 170 acusados de Estados Unidos sentenciados, con condenas importantes de 30 años de prisión o
más; - Decomisos e incautaciones de activos importantes así como contrabando que incluye millones de dólares
en efectivo, propiedades inmuebles, vehículos, armas de fuego y municiones, drogas; y - Múltiples acusaciones y solicitudes de extradición exitosas contra objetivos de dirigentes extranjeros
localizados en Guatemala, México y Honduras.
Justo esta semana la dirigente de una organización de contrabando de migrantes fue sentenciada (en inglés) a 10
años de prisión por su papel en el contrabando con fin de lucro de más de cien (100) migrantes de Honduras a
Estados Unidos.
Utilizar recompensas económicas para desmantelar el liderazgo de las redes de contrabando transnacional de
personas
El Departamento de Justicia y el Departamento de Estado están poniendo en marcha la iniciativa ASR (Anti-
Smuggling Rewards) de recompensas contra el contrabando diseñada para desmantelar el liderazgo de las
organizaciones de tráfico ilícito de personas que traen migrantes a través de América Central y de la frontera sur de
Estados Unidos. La iniciativa ASR hará uso de la autoridad legal existente, por medio del Programa de recompensas
contra la delincuencia organizada transnacional del Departamento de Estado, para ofrecer recompensas económicas
por información que conduzca a la identificación, localización, arresto o condena de los principales responsables de
actividades importantes de tráfico de personas en la región.
La iniciativa ASR estará dirigida a categorías de alta prioridad de contrabando de personas, tales como: - Dirigentes de ciertos cárteles identificados y otras organizaciones transnacionales responsables del
contrabando de personas en el Hemisferio Occidental y a través de la frontera sur de Estados Unidos; - Dirigentes y organizadores de redes de contrabando de personas responsables de ciertos eventos
identificados de fatalidades en masa; y - Ciertos fugitivos internacionales de alta prioridad identificados que son buscados por ofensas de tráfico de
personas.
Además, el Departamento de Justicia ofrecerá la posibilidad de recompensas adicionales para aquellos que
proporcionen información que resulte en el decomiso de rendimientos criminales obtenidos de actividades de
contrabando de personas. El Departamento del Tesoro, en coordinación con la iniciativa ASR continuará empleando
su autoridad para perturbar operaciones de alta prioridad de tráfico de personas.
Aumento de las penas para los traficantes de personas más activos y peligrosos
Al menos desde 2016, el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) han instado a la
Comisión de Sentencias de Estados Unidos a considerar el endurecimiento de las penas para quienes cometan delitos
de tráfico de personas. Las actuales directrices para la imposición de penas no tienen plenamente en cuenta la
gravedad o el alcance de la mala conducta de los acusados en los casos de contrabando de seres humanos, lo que da
lugar a incentivos perversos y reduce la capacidad de los fiscales para perseguir a los dirigentes de las
organizaciones de tráfico. A pesar de las renovadas solicitudes del Departamento de Justicia y del DHS tan recientes
como del año pasado, la Comisión no ha aumentado significativamente las penas para los contrabandistas de
personas más peligrosos.
Por ello, el Departamento de Justicia y el DHS están apoyando a los fiscales en sus esfuerzos por responsabilizar a
los individuos acusados del peligroso tráfico de personas, y el Departamento de Justicia tiene la intención de buscar
nuevas y mayores penas contra los contrabandistas de personas que tengan debidamente en cuenta la gravedad de su
conducta criminal y la miseria humana que causa. La propuesta introduciría tres cambios importantes en la directriz
estadounidense sobre penas §2L1.1 (U.S. Sentencing Guideline) que regula los delitos de tráfico de seres humanos: - Crear categorías de penas más elevadas según la cantidad de personas traficadas por el acusado;
Aumento de penas en caso de que la conducta de los acusados resulte en lesión o muerte para más de una
persona; y - Asegurar que los acusados sean sujetos a mayores sentencias en caso de asalto sexual y otros tipos de
conducta sexual prohibida cometidos durante la ofensa del contrabando, incluso si dicha conducta ocurrió
fuera de la jurisdicción de Estados Unidos.
Desplegar recursos del Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional para esfuerzos
específicos de aplicación de la ley
El Departamento de Justicia está colaborando con el Departamento de Seguridad Nacional para asignar más fiscales
y personal de apoyo a fin de aumentar los procesos federales relacionados con la inmigración en las fiscalías
federales fronterizas. Esta asociación operativa crítica se está llevando a cabo a pesar de un presupuesto aprobado
para el año fiscal 2024 que incluye la mayor disminución de fondos de un año a otro para las Fiscalías Federales de
Estados Unidos en la historia del Departamento de Justicia. Los esfuerzos incluyen el despliegue de más fiscales
adjuntos especiales del DHS a las fiscalías fronterizas, la asignación de personal de apoyo destacado a las fiscalías
críticas, la búsqueda de fiscales del Departamento de Justicia para prestar servicios en las fiscalías de los distritos
fronterizos, y la asociación con agencias federales para identificar recursos adicionales para combatir estos delitos.
Además de aumentar nuevos recursos para los distritos fronterizos, las Fiscalías Federales de Estados Unidos
continuarán desplegando los recursos y estrategias existentes dirigidos a los delitos de inmigración.
Sobre la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha (JTFA)
La Sección de Derechos Humanos y Procesos Especiales (HRSP) de la División Penal del Departamento de Justicia
de EE. UU. (DOJ) dirige la JTFA en colaboración con las Fiscalías Federales de Estados Unidos y con el apoyo
específico de la Oficina de Asuntos Internacionales; la Oficina de Desarrollo, Asistencia y Capacitación Fiscal; la
Sección de Estupefacientes y Drogas Peligrosas; la Sección de Lavado de Dinero y Recuperación de Activos; la
Oficina de Operaciones de Aplicación de la Ley; y la Sección de Crimen Violento y Delincuencia Organizada. La
JTFA también cuenta con una importante inversión policial del DHS, el FBI, la Administración para el Control de
Drogas y otros asociados. La JTFA coordina estrechamente con las fuerzas del orden extranjeras las investigaciones
transfronterizas, los arrestos de objetivos extranjeros y las extradiciones.